Los Humedales de México: hábitat estacional para las aves acuáticas migratorias.
La temporada de invernación de patos y gansos en México está por terminar. Las diferentes especies ya se empataron y se están apareando, la temperatura ambiental comienza a elevarse, la humedad disminuye, la duración relativa del día y la noche está cambiando. Estos cambios, junto con los cambios en la presión barométrica y el reloj biológico de las aves, señalan el momento de su regreso hacia el norte, rumbo a las áreas de anidación, que para muchas especies se encuentran en las praderas del norte de Estados Unidos, el sur de Canadá o incluso en la región de los bosques boreales.
Durante su estancia en México, los humedales costeros y continentales les brindaron refugio y alimento; sin embargo, para que pudieran pasar el invierno en buenas condiciones, fue necesario que estos sitios contaran con abundante agua y alimento que, dependiendo de la especie, está relacionado a la existencia de vegetación acuática, tubérculos, plantas emergentes con semillas, moluscos, peces o invertebrados acuáticos.
Imagen 1. Pato boludo menor (Aythya affinis), Laguna de Tamiahua, Veracruz. Durante el invierno se le puede encontrar en humedales de agua dulce o salobre en las cuatro regiones prioritarias del país. Sin embargo, son los sitios prioritarios Laguna de Tamiahua en Veracruz y Lagunas de Tabasco en la costa del Golfo de México, las principales áreas de concentración para esta especie (Conteo de medio invierno USFWS 1936 – 2006; DUMAC, 2018 – 2024).
¿En dónde se distribuyen las aves acuáticas migratorias en México?
Los patos y gansos migratorios se distribuyen principalmente en cuatro regiones prioritarias, ubicadas desde la Península de Baja California hasta la Península de Yucatán, y su presencia varía según la especie, las condiciones climáticas y la disponibilidad de hábitat que coincide con sus hábitos de alimentación. En términos generales, algunas especies de patos utilizan una amplia variedad de humedales poco profundos (menos de 2 metros) tanto naturales, como artificiales; ya sean de agua dulce, salobre o salada. Además, también pueden encontrarse en áreas intermareales adyacentes a bosques de manglar.
La capacidad de las aves acuáticas para habitar distintos tipos de humedales está relacionada con varios factores, entre los que destaca su dieta, la cual depende de la forma y de la estructura de su pico, que les permite filtrar partículas de distintos tamaños y seleccionando el tipo de presas que pueden capturar.
Imagen 2. Ejemplos de algunos invertebrados acuáticos que forman parte de los recursos alimenticios de las aves acuáticas: a) Hemiptero (Barqueros-Water boatman); b) Anélido (lombriz); c) de izquierda a derecha: Diptero (larva de mosquito), Arácnido, Odonato (larva de libélula); d) Odonato (larva de libélula); e) Gasterópodos (caracoles); f) Hemiptero (Backswimmer); g) Branquiopodo (camarón); h) Megaloptera (larvas de mosca de pesca).
Es por esta especialización que podemos observar múltiples especies de patos coexistiendo en un mismo hábitat sin competir por el alimento. Por mencionar algunos ejemplos, el pato golondrino, busca humedales donde pueda alimentarse de semillas y tubérculos de vegetación acuática, por ejemplo de las especies Najas sp. Chara sp. y de vegetación emergente como Polygonum spp. Panicum spp. Cyperus sp. Paspalum sp. Echinochloa sp., además de invertebrados acuáticos como larvas de dípteros. En estos mismos humedales, la cerceta de alas verdes y cerceta canela se alimentan de semillas pequeñas, hojas de vegetación emergente e invertebrados acuáticos, mientras que la cerceta de alas azules complementa su dieta con caracoles y semillas de vegetación acuática de la especie de Ruppia marítima.
Imagen 3. La diversidad de la forma y estructura de los picos en las aves acuáticas les permite filtrar partículas de distintos tamaños y, por lo tanto, acceder a diferentes tipos de presas. Esto permite que especies con diferente morfología de pico, no compitan por los recursos alimenticios, facilitando la coexistencia de especies en un mismo lugar.
Los patos pinto y panaderos se alimentan principalmente de hojas, raíces y semillas de vegetación acuática sumergida, como Myriophyllium spicatum y Ceratophyllum demersumlos o de pastos acuáticos como Ruppia marítima, Stuckenia pectinata y Zannichellia palustris, complementando su dieta con algunos invertebrados acuáticos.
El pato cucharón, una de las especies migratorias más frecuentes en los humedales de casi todo México, basa su alimentación en invertebrados acuáticos como cladóceros, gasterópodos y copépodos, así como de pequeños vertebrados incluyendo peces.
Imagen 4. Cerceta de alas azules (Spatula discors), su rango de distribución durante el invierno es desde humedales de agua dulce a salobres en las cuatro regiones prioritarias, siendo la costa del Golfo de México donde se ha registrado la mayor concentración de esta cerceta, siendo el sitio prioritario Lagunas de Tabasco y Campeche donde se registra la mayor concentración (Conteo de medio invierno USFWS 1936 – 2006; DUMAC, 2018 – 2024).Imagen 5. Cerceta de alas verdes (Anas crecca). Durante el invierno, su rango de distribución se concentra en la región altiplano central, siendo el Lago de Zumpango, Presa Huapango, Lago de Cuitzeo y Presa Silva, donde se han registrado las mayores concentraciones, sin embargo, también se hace presente en humedales estuarinos de la costa del Pacífico norte (DUMAC, 2018 – 2024).Imagen 6. Hembra de pato boludo anillado (Aythya collaris). Se distribuye tanto en la región altiplano central, como en las costas del Golfo de México y costa del Pacífico norte. Durante los últimos años, los principales sitios de invernación han sido el Lago de Cuitzeo en Michoacán, Lagunas de Alvarado en Veracruz y en los humedales estuarinos de la Península de Baja California.
La especialización en la alimentación no solo permite la coexistencia de las especies en un mismo hábitat, sino que también determina distribuciones más específicas; por ejemplo, la Branta negra del pacífico, en invierno se concentra en bahías y humedales estuarinos someros de la Península de Baja California y de manera dispersa en Sonora, donde se alimenta de un pasto marino de la especie Zoostera marina. Por su parte, los gansos frente blanca y gansos nevado prefieren invernar en humedales de agua dulce cercanos a campos agrícolas de maíz y sorgo en Chihuahua, Durango, Zacatecas y Tamaulipas; no obstante, los gansos nevado también pueden encontrarse en áreas intermareales del Delta del Río Colorado en Sonora.
Imagen 7. Gansos nevado (Anser caerulescens) alimentándose en área agrícola aledaña a Laguna de Mexicanos, Chihuahua.
El pato moteado habita exclusivamente en humedales de agua dulce poco profundos, salobres o áreas intermareales en la costa de Tamaulipas y Veracruz, donde su dieta se basa en semillas de vegetación emergente e invertebrados acuáticos. De manera similar, durante el invierno, el pato cabeza roja tiene su mayor concentración en la Laguna Madre de Tamaulipas, donde se alimenta principalmente de semillas y rizomas del pasto marino Halodule wrightii.
Por otra parte, el pato mexicano una especie de ave acuática no migratoria, adaptada a ambientes semidesérticos y endémica de la región altiplano norte y altiplano central de México basa su alimentación en semillas y tubérculos de vegetación emergente, brotes de alfalfa, maíz. trigo, garbanzo, sorgo y en menor frecuencia, invertebrados acuáticos.
Aunque algunas especies complementan su alimentación en áreas agrícolas, los humedales costeros y continentales siempre serán su principal fuente de alimento. Sin embargo, en nuestro país, factores como la variación en las precipitaciones, la contaminación, la erosión de suelos, la construcción de infraestructura y los cambios de uso del suelo han generado importantes impactos a los humedales.
La relación entre la dieta, la morfología de las aves y las características y disponibilidad de hábitat influyen en la distribución de las especies durante su migración en nuestro país, evidenciando la importancia de conservarla gran diversidad de humedales en el país, que son esenciales como fuente de alimento y refugio para que las aves acuáticas completen su ciclo de vida, asegurando el futuro de sus poblaciones.
Imagen 8. Vegetación acuática sumergida. Laguna de Tamiahua, Veracruz.Imagen 9. Pato cucharón (Spatula clypeata). Humedales aledaños a área agrícola. Bahía Santa María, Sinaloa.Imagen 10. Humedales estuarinos de bosque de manglar, donde se desarrolla el pasto marino Zoostera marina, principal alimento para la Branta negta del pacífico. Estero La Bocana, Baja California Sur.